Pareciera que la gente buena y noble ya no tuviese cabida en la sociedad, pues se prioriza la mentira y el abuso, la muerte es noticia y el sufrimiento es negocio, estos son los parámetros con los que se maneja la vida en estos tiempos, aún así DIOS sigue haciendo de las suyas conquistando corazones y derramando bendiciones.
La nobleza de corazón en otrora era vista como virtud, como algo digno de imitar, con el paso del tiempo esto ha cambiado, ahora la nobleza es vista como sinónimo de debilidad y fracaso, en nuestro mundo altamente competitivo se valora más el ego y la frialdad.
La vida está llena de pruebas y conflictos, el corazón muchas veces termina revistiéndose de una coraza de acero para evitar ser lastimado, los sentimientos nobles dejan de florecer pues quedan encerrados detrás de una muralla de miedo y desconfianza. Si bien la vida está llena de pruebas y conflictos y por ello muchas veces urge ser de acero, esto no puede llegar a opacar la nobleza intrínseca que tiene el corazón humano, las pruebas, las caídas y el dolor son normales pues forman parte de vivir y madurar, con ello nos hacemos más fuertes y también más firmes.
La soledad lástima, el fracaso confunde y el llanto entristece, pero si vamos de la mano de DIOS, las pruebas se convierten en enseñanzas, en caricias de AMOR que transforman el dolor en esperanza, si bien es bueno ser "de acero" para afrontar los tiempos difíciles que nos toca vivir, es en la FE donde encontramos consuelo y fortaleza, es en la FE y en el AMOR PERFECTO DE DIOS donde se puede ser de acero y a la vez tener un corazón noble.
Es en este balance entre fortaleza y nobleza donde florece la FE y el AMOR, ambas cualidades forman parte de ese plan perfecto de DIOS para con la humanidad, la templanza y la FE forjan el corazón humano, lo hacen más resistente y a la vez más noble.
Ser de acero pero con un corazón noble constituye todo un reto que solo puede llegar a conseguirse con una FE firme en DIOS, con una humildad profunda que solo se la consigue en presencia de la EUCARISTÍA y con una paciencia a prueba de todo que solo se la obtiene por GRACIA del ESPÍRITU SANTO.
Si bien la sociedad está envuelta en una crisis fuerte de identidad, todavía existen esos corazones nobles que constituyen un faro en la oscuridad, alumbrando en la FE y siendo firmes en la vida.
"Primero que nada, vigila tu corazón, por que en él está la fuente de la vida." Proverbios 4:23
"Primero que nada, vigila tu corazón, por que en él está la fuente de la vida." Proverbios 4:23
Marce Miranda Loayza