
Vivimos en una sociedad que prioriza el individualismo y la soledad, dañando al corazón humano llenándolo de temor, se desconfía de todo y de todos, incluso de DIOS, se cierra con llave al corazón evitando así que entre el amor y el perdón.
El racismo y la discriminación son síntomas de una humanidad triste y dolida , el miedo enmudece a la solidaridad y la ignorancia da paso a la violencia, aún así, la llave del AMOR se encuentra al alcance de nuestras manos, se encuentra a buen recaudado en el centro de nuestro propio corazón.
Solo el ser humano es capaz de abrir su corazón al amor y al perdón, es sólo cuestión de FÉ, la FÉ es la llave que puede abrir hasta el corazón más lastimado y duro, y es que la FÉ por más que sea atacada, menospreciada y vapuleada no puede llegar a ser desterrada del centro del corazón del hombre, esto por una simple razón, DIOS la puso ahí y por ende permanecerá ahí hasta el fin de los tiempos.
La llave del AMOR y del perdón se encuentra en el centro del corazón humano, solo nosotros podemos decidir si la usamos o no, solo nosotros podemos hacer que el miedo pierda terreno frente al AMOR, solo nosotros podemos decidir si vivimos o solo sobrevivimos.
El corazón humano puede abrirse al prójimo y al AMOR con la llave de la FÉ, ya que no hay miedo que resista a la esperanza y no hay oscuridad que no se rompa con un poco de luz.
Marce Miranda Loayza